La voluntad de la actuación sobre la Casa del Piñón es recuperar un edificio emblemático en el conjunto de piezas que conforman el repertorio arquitectónico de época modernista de la Región de Murcia. Para que ello resulte posible (desde los nuevos usos proyectados), el edificio existente se debe adaptar a las condiciones exigidas a los edificios públicos contemporáneos, desde la realidad ruinosa de un edificio residencial burgués construido y pensado para habitantes y costumbres de hace más de un siglo.
La catalogación del inmueble como B.I.C. invita a una reflexión más detenida sobre el objeto construido y sus características – históricas y constructivas -, para que la intervención y la necesaria adaptación, ya mencionada, resulte rigurosa y cuidadosamente integradora en el edificio existente.
La estructura general del edificio, amplia y regular, ha resultado idónea para la nueva función a la que se ve destinado, permitiendo una rigurosa localización del programa requerido en los cuerpos y volúmenes existentes.
Según lo anteriormente expuesto, los criterios generales de la intervención actúan:
+ Rescatando el esplendor de la imagen histórica desde el respeto formal y la calidad constructiva de las fachadas a la calles exteriores, a C/ Mayor y C/ Jacinto Conesa, e interiores, a patio Norte y patios interiores.
+ Recuperando las volumetrías y los órdenes internos que estructuran el espacio general en los diferentes niveles (accesos, escaleras, recorridos internos, niveles de forjados, alturas de planta, etc.).
+ Igualmente potenciando el carácter y la presencia de los patios interiores.
+ Proponiendo nuevos usos y tratamientos a la planta de cubierta, rescatada como plano de mirador sobre el paisaje urbano y del entorno de la ciudad.