La nueva construcción se destina a servicios que completan las actuales instalaciones de la empresa Audi-Volkswagen, talleres en planta baja y almacenamiento de coches en las plantas superiores.
El edificio, tanto por la aplicación de la normativa urbanística como por el cumplimiento del programa de necesidades demandado, se desarrolla en dos alturas y rescata la cubierta – plana y transitable -, como un plano más de uso.
Un espacio regular de distribución concisa apoyado en un trazado modular estricto – sin alardes estructurales innecesarios -, y una envolvente continua con un tratamiento unitario en las dos fachadas configuran la resolución última de la edificación.
El proyecto conjuga la máxima funcionalidad organizativa del espacio disponible, con la optimización de los recursos económicos con que se cuenta:
En la estela de las tecnologías más actuales – en un edificio con carácter de escaparate de los productos que comercializa, coches de las más altas prestaciones -, se emplean soluciones constructivas blandas, sencillas, pero que al mismo tiempo ofrecen una expresión clara y precisa de los medios y los procesos utilizados.
Los diferentes planos de hormigón visto multicapa que resuelven en su espesor todas las funciones – estructurales, acabados, rodadura, impermeabilización -, son atravesados por la plataforma montacoches, un plano móvil que conecta funcional y visualmente todos los niveles.
Los paramentos verticales, planos continuos de aluminio y vidrio, actúan como una membrana que relaciona el interior y el exterior del edificio y por su condición de transparencia activa, cambia según las condiciones y el momento del día y de la noche.