VPS se centra en un modelo de vivienda que se adapta al cambio pero sin olvidar el pasado. Utiliza las últimas tecnologías en construcción sostenible con huella de CO2 casi nula o incluso positiva gracias a su estructura de madera laminada, a la vez que explora y reinterpreta elementos y soluciones constructivas de la arquitectura vernácula de las Islas Baleares. Sus siglas definen los tres principales principios que en torno a ellas se dan:
VIVIENDAS
Las viviendas entendidas como un espacio multiusos, cambiante y orgánico. Con estancias equipadas, pero con la posibilidad de tener un uso alterno al previsto en un primer momento. Viviendas que, por lo tanto, se adapten y personalicen según la persona que las habite. Viviendas que no solo cumplan las de condiciones mínimas de habitabilidad, sino que también ofrezca unos condicionantes extra que enriquezcan la vida de sus habitantes.
PROTECCIÓN
La protección por lo público, por lo social por lo de todos. La protección por una vivienda digna para todos. La protección por los recursos públicos y la moderación en el gasto pero sin deteriorar la calidad edificación, gracias a un diseño sostenible. La protección por la vida en comunidad y las relaciones sociales vecinales. Y por último, la protección por el medioambiente.
SILVESTRE
“Hoy la mayoría de las casas gusta sólo a dos personas: al propietario y al arquitecto. La casa tiene que gustar a todos. A diferencia de la obra de arte, que no tiene que gustar a nadie. La obra de arte es asunto privado del artista. La casa no lo es.”
Adolf Loos en 1910
Las casas, como bien expone Loos, tienen que gustar a todos. Quizás, el cambio entre 1910 y hoy es la definición de Todos. ¿Quiénes somos todos? Esta propuesta define sus estrategias proyectuales en torno a todo lo que vive en nuestro planeta, que no es sino nuestra casa. Estas viviendas no solo tienen en cuenta a los seres humanos que las habitan, que las ven, o que incluso las sienten (salud); sino que están hechas para todo el ecosistema. Primero desde un punto de vista de no agresión y segundo, como potenciadores de la misma. Además, se ofrece el apoyo necesario para que la naturaleza pueda colonizar el edificio en estado puro, silvestre, salvaje…
